Durante el año de 1967, los entonces, Electricistas del Necaxa, jugaron cinco partidos internacionales de los cuales solo cayeron derrotados en una ocasión por el Cruzeiro de Brasil.
El 31 de enero empataron a dos goles con el Estrella Roja de Yugoslavia, en un encuentro amistoso internacional, que muy poco o nada tuvo de amistoso,
El partido fue muy disputado y ríspido y finalmente desemboco en bronca y expulsados, sin embargo, se vio un gran fútbol de parte de ambos equipos.
El 30 de agosto Necaxa rescato importantísimo empate a cero goles con el Internazionale de Milán, dirigido por “HH” Helenio Herrera y que traía en sus filas, entre otras figuras a Giacinto Fachetti, Sandro Mazzola y Burgnich.
El aniversario de la Virgen de Guadalupe, Patrona de México, 12 de diciembre del mismo año, Necaxa cerro sus encuentros internacionales en el Estadio Azteca imponiéndose ante el difícil equipo teutón Eintrach Brunswick un gol por cero.
No era frecuente, ni mucho menos común que los equipos mexicanos derrotaran a los brasileños, sin embargo, en 1967 los Electricistas del Necaxa parecían estar embalados y no permitir que nadie les pisara la sombra en el Estadio Azteca de la capital mexicana y fue así como, la noche del 4 de abril de 1967, derrotaron por dos goles a uno al Flamengo del Brasil mejor conocido como el “Fla O Mais Querido Do Brasil”.
Dos golazos uno del “Flaco” Alfredo Romo desde fuera del área y el del triunfo de Manolo Lapuente dejaron mas que satisfecha a la afición necaxista que asistió al Coloso de Santa Úrsula.
Domino mas el Necaxa, que con juego rápido y de defensa escalonada se adueño de la media cancha. Se puso en ventaja 1-0 a los 23 minutos por combinación de Lapuente a Alfredo Romo, quien desde fuera del área soltó cañonazo imparable; Iván el arquero ni siquiera rozo el balón.
En la segunda parte prosiguió el dominio de los locales, frente a un Flamengo que se veía totalmente sorprendido por la brillante actuación rojiblanca.
Sin embargo, en el único descuido de la trinchera necaxista, Fio registro el tanto brasileño del empate a los 10 minutos.
Manuel Lapuente, un baluarte de la delantera electricista consumo la segunda anotación a los 23 minutos de la segunda parte.
Necaxa domino el resto del encuentro, aunque con poca fortuna, ya que, entre los postes, el larguero y las buenas intervenciones del portero carioca, no pudo ampliar el marcador, pese buscarlo con toda su ofensiva.
Este ha sido uno de los grandes triunfos de equipos mexicanos ante extranjeros en el monumental Estadio Azteca.
1967 y el Necaxa, un equipo de leyenda, seguía forjando su historia.
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